Falso conductor de Uber que andaba con 'kit de violación' fue condenado a 23 años de prisión

Después de un tenso período de investigación y juicio, Graham Head, un hombre de 66 años de Pevensey, East Sussex, ha sido condenado a 23 años de prisión. Head fue encontrado culpable de haberse hecho pasar por un conductor de Uber, rondando las calles con un espeluznante "equipo de violación" con el que perseguía a mujeres vulnerables para atacarlas.

Head, un depredador sexual, mantenía en su Mercedes una serie de ítems insólitos: Viagra, guantes de látex, un pasamontañas y aceite para bebés. Fue finalmente capturado después de que una de las mujeres a las que agredió logró memorizar una sección de su matrícula personalizada, según The Sun.

La policía de Sussex publicó imágenes del momento en que Head fue arrestado, desenmascarando el terror que sembraba en las noches de Sussex. Pero no solo encontraron su macabro kit en el automóvil, también descubrieron en su casa gas pimienta y una porra extensible, añadiendo un capítulo más oscuro a sus crímenes.

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El juicio tuvo lugar en el Hove Trial Center, donde un jurado lo encontró culpable de secuestro, intento de violación y agresión sexual. Uno de los incidentes más alarmantes fue cuando intentó violar a una mujer, huyendo solo cuando sonó su teléfono.

La segunda víctima de Head, una mujer en sus 20 años, despertó aterrada en el coche del depredador creyendo estar en un taxi. Logró escapar después de propinarle una patada en la ingle a Head. A pesar del trauma, tuvo la valentía de recordar tres dígitos de la matrícula de su Mercedes plateado, y llamó a la policía inmediatamente.

El juez principal, Jeremy Gold, elogió a la joven en la audiencia de sentencia de Head: "Si no fuera por ella, él no habría sido detenido y no estaríamos donde estamos hoy". Minutos después de la llamada de la joven, la policía localizó el automóvil de Head y lo detuvo tras una breve persecución.

Las pruebas en contra de Head aumentaron cuando se descubrió que su historial de búsqueda en Internet incluía frases como "si un teléfono móvil está apagado, ¿se puede seguir rastreando?". También realizó múltiples búsquedas sobre los horarios de apertura de clubes nocturnos en Brighton, East Sussex y Surrey, y las noches de estudiantes de Brighton.

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En un desgarrador testimonio, la primera víctima de Head relató que los "impactos físicos" fueron "temporales", pero "los impactos psicológicos no lo fueron". Ahora se siente insegura y teme salir sola por la noche.

La segunda víctima, demasiado traumatizada para hablar, no pudo emitir una declaración, según informó el fiscal Ryan Richter. Por su parte, Head recibió una sentencia de 18 años, con cinco años adicionales en licencia extendida. Según las leyes locales, será elegible para libertad condicional después de cumplir al menos 12 años de su sentencia, de acuerdo con el juez Gold.

La superintendente Adele Tucknott, líder de la policía de Sussex para la violencia contra las mujeres y las niñas, enfatizó que "las mujeres y las niñas deberían poder caminar por las calles a salvo de depredadores peligrosos como Graham Head". Añadió que el encarcelamiento de Head es un paso más en su compromiso de asegurar que Sussex siga siendo un lugar seguro para mujeres y niñas.

Por último, el detective Constable Elliott Lander, del Equipo de Delitos Mayores de Surrey y Sussex, describió a Head como "un delincuente depredador que se ganó la confianza de estas víctimas haciéndose pasar por taxista". Lander agregó que "sin ellas, este individuo peligroso aún podría estar en libertad", instando a cualquier otra persona atacada por Head a contactar a la policía.

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