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Nuevos detalles sobre la desaparición de la psicóloga Adriana Pinzón
No se conoce información sobre ella desde el 7 de junio. Jonathan Torres es el principal sospechoso y se enfrenta a la imputación de delitos por desaparición forzada y homicidio agravado.
Adriana Pinzón es una psicóloga y empleada de una empresa petrolera de quien no se tiene información desde el pasado 7 de junio. Vivía en Zipaquirá sin pareja ni hijos y por su desaparición fue capturado Jonathan Torres, el cuñado de la mujer y principal sospechoso para las autoridades.
Según Torres, la última vez vio a Pinzón fue en un concesionario de Chía donde le estaba ayudando a vender su vehículo desde mayo. Sin embargo, nuevos detalles de la Fiscalía comprueba lo que pudo haber pasado con la vida de la psicóloga.
El hombre se enfrenta a una imputación por delitos de desaparición forzada y homicidio agravado luego de revelarse las imágenes de cámaras de seguridad. Torres ingresó al conjunto residencial de Adriana sobre el mediodía del 7 junio de 2022.
En el lugar, en dos oportunidades salió en el carro de su cuñada. Primero con un morral negro y después con bolsas plásticas que cargaba con dificultad y que dejó en el baúl. En la inspección del inmueble de la mujer, los peritos forenses hallaron rastros de sangre en una habitación y en otros puntos.
Incluso, un conocido del investigado llegó hasta las autoridades y reveló que Torres le dio a guardar el maletín con cuchillos con manchas, documentos de la psicóloga y otros elementos que lo vinculaban a un posible asesinto.
Sobre el implicado en el crimen, su defensor Jimmy Narváez, aseguró que fue miembro activo de la Policía y allí se desempeñó como explosivista y francotirador. “Él trabajó en zonas rojas, vio morir a muchas personas. No creo que su estado de salud sea bueno. Creo que habrá que hacerle un examen psicológico en el proceso”, dijo Narváez.
Por su parte, la versión de Torres ante la Fiscalía es que acudió a hablar con Adriana Pinzón en su apartamento para exponerle sus problemas maritales y recibir el consejo de una profesional.
En medio de las investigaciones, aún no se conoce el paradero de la psicóloga de 42 años y empleada de la compañía de petróleos Sudamericanos Energy. Torres, en medio de la relación con la hermana de la hoy desaparecida, se había ganado la confianza de la familia.
Mientras tanto, el defensor del hombre expresó que Torres le manifestó que "no es responsable de su desaparición ni mucho menos de matar a su cuñada", dijo Narváez.
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