Detalles del contrato de Universidad Nacional que pone en tela de juicio prácticas de la Alcaldía de Medellín

Un polémico contrato firmado entre la Alcaldía de Medellín y la Universidad Nacional por $9.050 millones destinados a una estrategia de comunicaciones ha encendido las alarmas en la opinión pública. Información divulgada en redes sociales sugiere que gran parte de esos recursos públicos habrían sido desviados para financiar la campaña de varios candidatos del movimiento político "Independientes", liderado por el alcalde Daniel Quintero.

Lo que resulta aún más desconcertante es que el acuerdo fue firmado con una universidad que carece de una facultad de comunicaciones. Este detalle ha levantado sospechas sobre una posible estrategia de la Alcaldía para favorecer a los candidatos afines a Quintero.

El Colombiano informó que Luciana Beccassino figura como subcontratista en dicho convenio. Beccassino, una destacada estratega electoral, es hija de Ángel Beccassino, quien anteriormente lideró campañas presidenciales y tiene estrechos vínculos con el actual alcalde.

Fuentes cercanas al caso indican que Luciana ha trabajado en la campaña de Esteban Restrepo, aspirante a la Gobernación por el movimiento "Independientes" y cercano a Quintero. Además, se menciona su influencia en las narrativas promovidas por el alcalde en redes sociales, abordando temas controversiales como Hidroituango y el Grupo Empresarial Antioqueño.

Este patrón no parece ser un hecho aislado. Durante su mandato, Quintero ha mantenido una postura combativa, evidenciada en confrontaciones y rivalidades. Las acciones del alcalde parecen ser replicadas por candidatos del movimiento "Independientes".

Dentro de los subcontratistas vinculados a este convenio también se encuentra Juan Camilo Ortega Soto, quien anteriormente estuvo involucrado en un escándalo por publicidad con medios digitales de dudosa reputación. Dichos medios parecen haberse beneficiado de los recursos del contrato con la Universidad Nacional y respaldan la agenda y las disputas del alcalde Quintero.

Ortega Soto, además de estar vinculado a estas plataformas, es el representante legal de la Fundación Medellín Imparable, organización señalada por tener afinidad política con el alcalde y presuntamente haber intervenido en la pasada campaña presidencial.

Los recientes hallazgos sugieren que las tácticas de contratación con fines políticos podrían ser una constante en la administración actual. Las evidencias recolectadas por las autoridades apuntan a un modus operandi que se ha perpetuado durante la gestión de Quintero desde La Alpujarra. Se espera que estos señalamientos sean sometidos a una exhaustiva investigación para esclarecer las acciones de la Alcaldía de Medellín.

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