Agonía oculta de loro cabeciazul en Medellín: 17 años en cautiverio desnutrido y enfermo

Una lúgubre narración de dolor, maltrato y negligencia emergió recientemente de las publicaciones en las redes sociales del Área Metropolitana de Medellín. Un lorito cabeciazul, un vivaz miembro de la fauna sudamericana, vivió una vida de desesperación y sufrimiento, proporcionando una visión estremecedora de los horrores a los que pueden ser sometidos estos animales en cautiverio.

El loro cabeciazul, con su colorido plumaje verde y su cabeza distintivamente azul, es un nativo de las zonas tropicales y subtropicales de América del Sur. Pero la belleza vibrante que hace que estas aves sean tan atractivas también las ha convertido en objetivos para el tráfico de fauna, con la infeliz realidad de que se convierten en "trofeos" para los humanos que desean exhibirlas.

Este pájaro, un sorprendente emblema de su especie, fue entregado voluntariamente al Área Metropolitana después de sufrir durante 17 largos años en cautiverio. Las señales de abandono y negligencia estaban muy presentes. Un pico anormalmente largo había desvirtuado la curva fisiológica natural de la criatura, limitando su habilidad para comer y respirar correctamente.

El triste menú del ave cautiva consistía solo en frutas y galletas empapadas en agua, una alimentación insuficiente y mal balanceada que sus dueños le proporcionaban. Esta pobre nutrición llevó al desarrollo de serios problemas hepáticos que amenazaban la vida de la criatura.

Le recomendamos leer (Libres funcionarios de Humanaty & Inclusion que adelantan labores de desminado en el Meta)

Las circunstancias de este desafortunado loro cabeciazul se esclarecieron en el Centro de Fauna Silvestre, una colaboración con la Universidad CES. Los exámenes revelaron que el loro mostraba dificultades de movimiento y que, después de pasar tantos años en cautiverio, carecía de las habilidades necesarias para sobrevivir en su hábitat natural.

Complicando aún más su situación, el animal sufría de una hepatitis crónica. A pesar de los esfuerzos de los cuidadores y veterinarios para salvarlo, el loro sucumbió a sus múltiples afecciones y murió.

La intención del Área Metropolitana al compartir esta trágica historia es crear conciencia sobre la crueldad que conlleva el cautiverio de animales. Hasta hace muy poco tiempo, la seriedad de estos casos se pasaba por alto, y las prácticas de cautiverio eran consideradas como algo normal.

Otras noticias