Rancho Izaguirre: hallan casa de la muerte y torturas en México

El Centro de Investigación de Crímenes Atroces (CICA) ha desarrollado un análisis basado en imágenes satelitales con el propósito de documentar la evolución del Rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, donde se han hallado indicios de actividades delictivas asociadas con el crimen organizado.

La revisión de material satelital desde 2011 hasta 2025 ha permitido establecer una línea de tiempo de las modificaciones en la infraestructura y el uso del terreno.

Hallazgo y contexto de la investigación

A corta distancia de Guadalajara, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, conformado por familiares de personas desaparecidas, localizó lo que describieron como un centro de "reclutamiento forzado y exterminio" operado por el crimen organizado.

El rancho, con una extensión de más de 10,000 metros cuadrados, se convirtió en el foco de investigaciones luego del hallazgo de fosas clandestinas y restos humanos.

Las autoridades han vinculado estas actividades al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), lo que ha generado una amplia discusión sobre la crisis de desapariciones en el país.

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A partir del primer reporte emitido por el colectivo en 2023, se han identificado más de 500 evidencias dentro del predio, entre las que se encuentran restos óseos y prendas personales.

Estas evidencias sugieren que el sitio pudo haber sido utilizado como un espacio para la ejecución y disposición de víctimas.

Evolución del predio según imágenes satelitales

El análisis de imágenes obtenidas de Google Earth permitió trazar una cronología del desarrollo del rancho, identificando distintos momentos clave en su transformación:

30 de abril de 2011: El terreno no presentaba construcciones ni delimitaciones visibles.
Diciembre de 2014 - abril de 2015: Se documentó la construcción de edificaciones principales sin cambios notorios en el suelo.

27 de enero de 2017: Se observó un portón abierto y un vehículo tipo pick-up blanco dentro del predio. No se identificaron alteraciones en el terreno.

9 de diciembre de 2017: Apareció un camión dentro del rancho, desplazándose por un camino interno.

Marzo - abril de 2019: Se detectó una nueva construcción en la parte posterior del terreno y la remoción del techo de una estructura preexistente, evidenciando una división en tres espacios diferenciados.

12 de octubre de 2019: Se constató la reinstalación del techo sobre la edificación modificada previamente.

29 de octubre de 2020: La vegetación cubría gran parte del predio, sin registrarse cambios significativos en la infraestructura.

29 de abril de 2021: Se identificó la desaparición de la vegetación en el rancho y terrenos aledaños, sin modificaciones en la distribución del espacio.

Noviembre de 2021 - febrero de 2022: No se detectaron cambios en la configuración del terreno.

16 de mayo de 2023: Se registraron al menos 19 figuras circulares con bordes irregulares y tonalidades oscuras en la parte posterior del rancho. Estas marcas fueron interpretadas como posibles excavaciones.

20 de septiembre de 2024: Un operativo conjunto de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano permitió el rescate de dos víctimas de secuestro y la captura de diez personas presuntamente vinculadas a actividades ilícitas en el predio.

Marzo de 2025: Se identificaron tres cavidades en el terreno, un incremento respecto a la única registrada en mayo de 2023. También se constató la desaparición de la mayoría de las marcas circulares previamente detectadas.

Conclusiones de la investigación

El análisis satelital ha proporcionado información detallada sobre las transformaciones en el Rancho Izaguirre a lo largo de los años, revelando momentos de actividad y cambios en la infraestructura.

La correlación entre estos datos y los hallazgos de restos humanos refuerza las sospechas sobre su uso en operaciones del crimen organizado.

La información recopilada no solo permite reconstruir la evolución del sitio, sino que también contribuye a las investigaciones en curso, ofreciendo evidencia que respalda las denuncias de desapariciones y ejecuciones en la zona.

El Rancho Izaguirre, ubicado en el municipio de Teuchitlán, Jalisco, ha sido recientemente identificado como un centro de exterminio y entrenamiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), revelando una realidad escalofriante sobre la violencia del narcotráfico en México.​

Ubicación y antecedentes

Teuchitlán, situado a aproximadamente 60 kilómetros al oeste de Guadalajara, es conocido por su riqueza cultural y arqueológica. Sin embargo, la tranquilidad de esta región se ha visto perturbada por el descubrimiento de actividades criminales en el Rancho Izaguirre.

En septiembre de 2024, un operativo de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano resultó en la detención de diez personas y la liberación de dos individuos que estaban privados de su libertad en este lugar. En esa ocasión, se aseguraron armas y vehículos, pero no se profundizó en la investigación del predio. ​

Descubrimientos recientes

El 5 de marzo de 2025, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, alertado por una denuncia anónima, inspeccionó nuevamente el rancho y realizó hallazgos alarmantes:​

Restos humanos: Se encontraron fragmentos óseos calcinados y piezas dentales, evidenciando prácticas de exterminio. ​

Objetos personales: Se recuperaron alrededor de 493 pertenencias, incluyendo prendas de vestir, mochilas y calzado, que podrían pertenecer a personas desaparecidas.

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