Historia de un influencer quien construyó refugio para decenas de animales por huracán Beryl

Mauricio López, influencer de Yucatán, México, con una fuerte presencia en las redes sociales y una audiencia de más de 15 millones de seguidores, tomó medidas excepcionales para proteger a sus numerosas mascotas durante el huracán Beryl, que impactó México como huracán de categoría 2. 

Residenciado en Yucatán, López posee una variedad de animales incluyendo gallinas, patos, mapaches, cuyos y una avestruz llamada Ofelia, cuyo bienestar durante el huracán le preocupaba profundamente.

Ante la imposibilidad de albergar a todos los animales dentro de su casa por restricciones impuestas por sus padres, López optó por implementar un sistema de protección en su patio. 

Instaló lonas azules sobre las jaulas y colocó tablas de madera en el suelo para elevar a los animales en caso de inundaciones. Además, expresó su compromiso de estar atento a las necesidades de sus mascotas, incluso considerando la posibilidad de trasladarlas al interior de su vivienda si se hacía necesario.

"Voy a estar pendiente de mis animales, si hay la necesidad de que los meta a mi casa, los voy a tener que meter y hacer el arca de Noé", explicó López sobre su plan de emergencia.

En la fase previa a la llegada del huracán, también captó y compartió con sus seguidores el comportamiento alterado de su avestruz, que intentó entrar a la casa corriendo agitadamente, lo que López interpretó como una señal de la percepción del animal sobre los cambios inminentes en el clima. Durante el evento, se aseguró personalmente de que todos sus animales estuvieran a salvo.

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La comunidad en línea, al observar sus esfuerzos, comenzó a referirse al refugio improvisado como "el arca de Mau", destacando la variedad de especies que López mantiene en lo que algunos llamaron "la jaula de Mau".

En un contexto más amplio, los residentes de la Península de Yucatán también tomaron varias medidas para proteger sus propiedades en anticipación al huracán Beryl. 

Entre estas acciones, se incluyó la aplicación de cinta adhesiva en las ventanas y el marcado de tinacos con información personal para facilitar su identificación y recuperación en caso de ser desplazados por las fuertes lluvias. 

Una nota curiosa fue el mensaje dejado en un tinaco, alertando a quien lo encontrase de que el objeto estaba embrujado y debía ser devuelto al Museo Paranormal, lo que añade un toque de humor local ante las circunstancias adversas.

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