Condenan a contralor de Cundinamarca y aliado por pedir $140 millones tras adjudicación de contrato

El juez décimo penal de Bogotá, condenó al entonces contralor de Cundinamarca Juan Carlos Medina Ovalle y al funcionario del Fondo de Seguridad de la alcaldía de Bogotá Mauricio Forero Linares a 174 meses de prisión como coautores del delito de extorsión agravada.

Esto tras pedirle al contratista Reimpodiesel $140 millones, equivalente a un 20% como comisión por la adjudicación de un contrato para el mantenimiento de los vehículos de la gobernación de Cundinamarca.

Los hechos se remontan a los hechos denunciados por Mario Rueda Fonseca representante legal de la empresa Reimpodiesel mediante escrito de 27 de junio de 2005, en donde relato que el 3 de septiembre de 2004, su secretaria Gladys Quintana recibió una llamada telefónica de un sujeto que se identificó como Mauricio.

Este le dejó la razón de presentarse esa misma tarde en la carrera 13 con 49 para firmar el contrato adjudicado para el mantenimiento correctivo y preventivo del parque automotor, con la advertencia que de no asistir, este sería concedido al segundo postulante de la lista.

Acudió ese día junto con su esposa Maritza del Socorro Quintana a la Contraloría Departamental de Cundinamarca, extrañados por que la dirección correspondía a la entidad arriba mencionada. 

En tal lugar, antes de la puerta de entrada, fueron abordados por quien dijo llamarse Mauricio Forero Linares, empleado del Fondo de Vigilancia y Seguridad de Bogotá, que los saludo amablemente, los felicito por haberse ganado la licitación, pues los estaban esperando, por era el encargado de llevarlos a la oficina donde se firmaría el contrato.

Quien los condujo a una oficina ubicada en el piso 12 del edifico de la Contraloría Departamental de Cundinamarca, los traslado directamente al ascensor sin pasar por la recepción, la señora Quintana le dijo al sujeto, le parecía haberlo visto pero no se acordaba en dónde, ni cuándo.

Cuando llegaron a la oficina, se sientan al lado de un escritorio, que hay un vidrio polarizado que da a otra oficina, y en ese escritorio se encontraba un señor que no se identifica, quien se sale de la oficina, inmediatamente entra otro sujeto que se presenta como Lalo.

Posteriormente se identifica como Libardo Correa  Castañeda, quien les exigió para la firma del contrato la
entrega en efectivo $140.000.000.00 millones de pesos correspondiente al 20% del valor del negocio, so pena de resultar perjudicados en diversas formas.

Ese peculio era para repartirlo entre un "Grupo", que incluía al Contralor de Cundinamarca, al Gobernador, a Javi, y otras personas del Fondo de Vigilancia. 

Todo ocurrió en presencia de Mauricio Forero Linares en donde los señores Quintana alegaron no encontrar justificada esa exigencia, ya que se ganaron en franca lid la licitación y no tenían ese caudal.

Con posterioridad a la firma del contrato, que se realizó en la Secretaria General de la Gobernación sin presiones, los contratistas continuaron recibiendo amenazas por parte de Libardo Correa Castañeda, cuñado de la exreina Catalina Acosta quien exigía la entrega del dinero, de lo contrario le quitaría lo que más quería y le daría por donde más le doliera, fueron objetos de seguimientos y atropellos.

Debido a lo anterior, decidieron los señores Quintana, instalar una cámara de video en una de las oficinas de Reimpodiesel S.A, donde llego el señor Correa Castañeda, a quien previamente le habían dicho que podía
pasar a recoger la suma exigida.

Lalo asistió a recoger el dinero, pero cuando se dio cuenta que no estaba completo, se enfureció, escribió en un papel el valor que recibía y el saldo faltante. 

Al intentar salir de las instalaciones llevando consigo $25 millones de pesos, este fue interceptado por el gerente Mario Rueda, su esposa y varios trabajadores, quien tras forcejar recuperaron el dinero, pero aquel intento desenfundar el arma y fue reducido por personal de la empresa.

El juez del caso encontró probada la denuncia y ahora el excontralor y el exfuncionario de Fondo de Seguridad, los condenó en primera instancia y los envió a prisión.