En medio de los cuestionamientos de la Procuraduría, Bloomberg le dedica un reportaje a William Dau, alcalde de Cartagena

Ex vicepresidente de Blackstone elegido alcalde de Cartagena planea un fondo de mil millones de dólares, aquí el reportaje que el prestigioso portal periodístico dedica al polémico alcalde.

Según Bloomberrg, es el sueño secreto de muchos financieros de Wall Street: tomar las habilidades y los contactos adquiridos durante años de gestión de activos privados y aplicarlos a algo mal administrado en la esfera pública: una escuela o un museo querido.

Un exvicepresidente de Blackstone Group que se postuló para alcalde como un forastero y triunfó, no le faltan desafíos. Covid ha diezmado la industria del turismo, la corrupción es endémica y el aumento del nivel del mar amenaza la existencia misma de la ciudad.

Ahí es donde entran en juego sus años en finanzas. Dau, de 68 años, está utilizando cazatalentos internacionales para reclutar asesores y planea establecer un fondo de deuda en los EE. UU. Para recaudar al menos mil millones de dólares para pagar la infraestructura. Para protegerse del mar, quiere atraer a empresas internacionales para que inviertan en proyectos de mitigación, como el trabajo que Apple Inc. está haciendo en islas frente a la costa para proteger los manglares.

“Él ve su estilo de gestión como el de un CEO que delega tareas a sus vicepresidentes y les da seguimiento a sus resultados”, dijo Ana María González, consultora del alcalde sobre cooperación internacional y ex becaria de la Fundación Obama.

Dau tiene claro lo que enfrenta al buscar revivir su ciudad de 900.000 habitantes: “2020 fueron las aguas más turbulentas por las que tuvimos que navegar y no solo por Covid, sino por la corrupción desenfrenada, la oposición”, dijo en un comunicado. entrevista.

Cartagena es una de las ciudades coloniales mejor conservadas de América del Sur, un sitio del Patrimonio Mundial amurallado. A medida que Colombia superó una reputación de violencia y el turismo floreció, Cartagena se convirtió en un destino de primer nivel.

La búsqueda de Dau a una edad en la que la mayoría de la gente se jubila fue impulsada en parte por asuntos pendientes. Como abogado en la ciudad a principios de la década de 2000, Dau condenó abiertamente la corrupción, provocando tantas amenazas de muerte que buscó asilo político en los EE. UU.

Después de 15 años en Nueva York, Dau regresó el año pasado y se postuló para alcalde, ganando a pesar de gastar solo $ 70,000 en su campaña.

Para erradicar la corrupción, Dau dice que auditará contratos como los que privatizan el puerto y los sistemas de agua de Cartagena. Si se encuentra una infracción, recuperará el capital de la ciudad y lo venderá a fondos de inversión para recaudar dinero para nuevos proyectos de obras públicas.

El tiempo de Dau también es una bendición mixta. Semanas después de asumir el cargo, el país quedó bloqueado y la industria turística de Cartagena colapsó. El año pasado, casi 3 millones de viajeros extranjeros y nacionales volaron a la ciudad, según estadísticas del Ministerio de Turismo . También atrajo decenas de cruceros.

Los letreros de “Se alquila” proliferaron en las ventanas a lo largo de las coloridas calles del centro histórico. El desempleo, entre los más bajos del país, casi se triplicó a 18,1% desde 6,6% antes de la pandemia, según la oficina del alcalde.

La situación puso de relieve la desigualdad que durante mucho tiempo ha afectado a la ciudad, donde los turistas adinerados se alojan en elegantes hoteles boutique y cenan en restaurantes de lujo a poca distancia de los barrios marginales. Solo el 41% de los hogares de la ciudad comen tres comidas al día, frente al 82% antes del Covid-19, según una encuesta del gobierno publicada en octubre.

Por otro lado, con todo cerrado, quizás nunca haya habido un mejor momento para reiniciar. Dau dice que está aprovechando sus años en el departamento legal de GSO Capital Partners , el negocio crediticio global de Blackstone , que tiene $ 135 mil millones en activos bajo administración.

Dau planea establecer el fondo de deuda para reconstruir el bulevar frente al mar, crear un servicio de transporte acuático y, potencialmente, construir un nuevo centro de convenciones. La ciudad reevaluará su base de impuestos a la propiedad para recaudar ingresos que servirán como garantía contra los préstamos.

Hay planes en marcha para ampliar el aeropuerto y agregar uno nuevo. El objetivo es aumentar no solo el número de turistas, sino también la clase de visitantes. Si tiene éxito, dijo que más residentes ingresarán a la economía formal y la desigualdad disminuirá.

"Con Covid, tenemos un nuevo comienzo, una nueva pizarra", dijo. “No puedo arreglar a Colombia, pero puedo arreglar a Cartagena”.

Información de Bloomberg.