Ingreso de Colombia al banco de los BRICS cuesta dos billones de pesos

Colombia fue aceptada oficialmente como miembro del Banco de Desarrollo de los BRICS (NDB), bloque económico conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Este ingreso representa un paso estratégico para diversificar las fuentes de financiamiento del país, en un contexto marcado por tensiones diplomáticas y una creciente necesidad de impulsar proyectos sostenibles.

La adhesión implica un compromiso financiero de US$512,5 millones, equivalentes a $2,1 billones. Sin embargo, no se trata de una cuota obligatoria, sino de una compra de acciones que permite al país integrarse financieramente al banco y acceder a sus beneficios. En los próximos seis meses, Colombia deberá desembolsar US$102,5 millones ($429.000 millones). Los restantes US$410 millones ($1,7 billones) solo se pagarían si el banco lo requiere en el futuro.

Pese a este ingreso, Colombia no adquiere participación política en el bloque, ya que se une únicamente a la banca de desarrollo y no al grupo BRICS como tal. Esto significa que el país no tiene derecho a voto en las cumbres del grupo, aclaró el Ministerio de Relaciones Exteriores.

Según la canciller Laura Sarabia, quien solicitó el ingreso en mayo de 2025, esta decisión responde al interés del Gobierno en obtener nuevas alternativas de financiamiento para proyectos de infraestructura, energías limpias y sostenibilidad, sin depender exclusivamente del Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial.

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“El acceso de Colombia a esta banca abre la oportunidad para recibir financiamiento para proyectos férreos”, aseguró Sarabia, al tiempo que negó que esta decisión represente un distanciamiento con Estados Unidos: “Nunca hemos desafiado a EE. UU. Seguimos en contacto con ese país y manteniendo un diálogo en temas de inversión, migración y narcotráfico”, puntualizó.

El principal beneficio de este ingreso es la diversificación de fuentes de financiación, especialmente en un contexto de recortes de cooperación internacional, como los anunciados por la USAID, y el aumento de aranceles por parte del gobierno estadounidense.

El banco BRICS fue creado en 2010 con el propósito de reducir la dependencia de entidades como el FMI y el Banco Mundial, promoviendo un modelo de financiamiento multilateral alternativo. Según el Foro Económico Mundial, su existencia representa un reto directo al orden financiero liderado por el G7.

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