Van 414 ataques a la Fuerza Pública en lo que va del año

Colombia enfrenta un preocupante repunte de violencia contra la Fuerza Pública. En lo que va de 2025, se han registrado 414 ataques que han dejado un saldo de 81 uniformados muertos, según datos del Ministerio de Defensa. La cifra marca uno de los años más violentos para soldados y policías en la última década, con un aumento del 127 % en los homicidios de uniformados solo en el primer trimestre frente al mismo periodo del año anterior.

Aunque el Gobierno ha insistido en que no hay un “caos de violencia”, como lo expresó el presidente Gustavo Petro en abril, los hechos muestran una realidad alarmante: ataques con drones, emboscadas, carros bomba y otras acciones violentas se han intensificado en departamentos como Cauca, Valle del Cauca y Norte de Santander.

De los 81 uniformados asesinados en 2025, 41 murieron entre enero y marzo. Entre abril y junio, se reportaron otros 40: 15 del Ejército Nacional, 2 de la Armada y 23 de la Policía Nacional. Además, se han incrementado los ataques con tecnología, como el uso de drones, que según el Ministerio de Defensa aumentaron un 100 % en los primeros meses del año.

El hecho más grave de junio se produjo en Guachinte, donde una bomba instalada en una señalización vial mató a tres policías. Ese mismo día, otras explosiones con motos y coches bomba se reportaron en Cali, El Bordo y Corinto (Cauca), intensificando la percepción de inseguridad en la población.

A esto se suman hechos como el reciente secuestro de 57 soldados en El Tambo, Cauca, que fueron liberados tras una operación de rescate. Estas acciones, aunque no siempre letales, también comprometen la integridad física y moral de los miembros de la Fuerza Pública.

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Desde la Fundación Pares se ha advertido sobre la desigualdad tecnológica con la que operan las tropas. Mientras que el Estado tarda hasta dos años en adquirir drones, los grupos armados ilegales pueden acceder a este tipo de dispositivos en cuestión de días.

En respuesta, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, envió un mensaje a los 118.000 soldados del Ejército, reconociendo la gravedad de la situación, pero también recordando que el país ha superado momentos igualmente críticos en el pasado. “No se trata de ignorar los desafíos actuales, sino de recordar que contamos con las capacidades para enfrentar y anular cualquier amenaza”, expresó.

El ministro también confirmó que no hay cese al fuego vigente y que las fuerzas tienen autorización total para actuar en defensa propia.

A medida que avanza el año, el panorama de seguridad sigue siendo incierto, y los retos para alcanzar una paz sostenible parecen cada vez más complejos. Mientras tanto, las cifras revelan el alto costo humano que están pagando quienes integran las fuerzas del orden.

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