Tensión entre Irán e Israel: seis oleadas de ataques en tres días dejan decenas de muertos

En menos de 72 horas, Irán e Israel han protagonizado una de las escaladas militares más graves de los últimos años, con al menos seis oleadas de ataques aéreos y decenas de víctimas. La ofensiva comenzó el viernes 13 de junio con bombardeos israelíes sobre instalaciones militares y nucleares en Irán, lo que generó una rápida y contundente respuesta con misiles por parte del régimen iraní.

El gobierno israelí, encabezado por el primer ministro Benjamin Netanyahu, confirmó que el objetivo de los ataques fue “golpear el corazón del programa nuclear iraní”, incluyendo complejos en Natanz, Fordo e Isfahán. Según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), las instalaciones sufrieron daños considerables. También se reportaron bombardeos en bases militares y el aeropuerto de Mehrabad, en Teherán.

Irán activó su defensa aérea en al menos nueve provincias tras los ataques. La respuesta incluyó tres oleadas de misiles, una de las cuales impactó en las cercanías de Tel Aviv, provocando la muerte de una mujer y dejando más de 30 heridos en el norte de Israel. En ciudades como Jerusalén y Hebrón se observaron misiles interceptados en pleno vuelo, según reportes de la AFP.

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El saldo humano es elevado: Irán reportó oficialmente 78 muertos y más de 320 heridos, en su mayoría civiles. Entre los fallecidos se encuentran seis científicos nucleares y dos altos mandos de los Guardianes de la Revolución, lo que ha intensificado el discurso de represalia por parte del liderazgo iraní. El presidente Masud Pezeshkian advirtió que habrá una “respuesta más severa y poderosa” si continúan los ataques.

Israel, por su parte, mantiene en alerta máxima a su población. El ejército activó el estado de emergencia y llamó a los ciudadanos a buscar refugio. Aunque posteriormente se redujo el nivel de alarma, las autoridades recomendaron mantenerse cerca de los refugios ante posibles nuevas ofensivas.

Estados Unidos, a través del presidente Donald Trump, aseguró no haber participado en los ataques, aunque reconoció haber sido informado previamente. El mandatario advirtió a Irán que, si intensifica su respuesta, enfrentará represalias “más brutales”. La tensión surge justo cuando estaban por reanudarse negociaciones nucleares en Omán, las cuales ahora permanecen en suspenso.

Además del impacto humanitario, la crisis ha tenido efectos económicos inmediatos. El precio del petróleo se disparó más del 12 % tras conocerse los ataques, generando preocupación entre los mercados internacionales. Mientras tanto, varios países como Irán, Irak, Jordania e Israel cerraron su espacio aéreo, en medio del creciente temor a una confrontación directa y prolongada en la región.

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