Descenso en actividad de taladros afecta 20.000 empleos en Colombia

En el reciente informe presentado por Campetrol, entidad representativa de servicios en el sector petrolero, se evidencia una preocupante disminución en la actividad de taladros en Colombia, especialmente desde finales de 2022. 

La causa principal se atribuye a las acciones y decisiones del Gobierno Petro, incluyendo la implementación de la reforma tributaria.

La actividad de taladros ha experimentado una reducción del 25% anual hasta septiembre, registrando 117 equipos en actividad. Esta disminución ha ocasionado una pérdida de aproximadamente 20.150 empleos, considerando tanto puestos directos como indirectos. 

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Desglosando estos números, los taladros de perforación reflejan una pérdida de 14.950 empleos (2.300 directos y 12.650 indirectos), mientras que los taladros de reacondicionamiento muestran una pérdida de 5.200 empleos (800 directos y 4.400 indirectos).

En búsqueda de mercados más rentables, muchas empresas han trasladado sus operaciones de taladro a países como México, Ecuador y Brasil. 

Las expectativas apuntan a que, si se produce una reactivación en países como Venezuela y Argentina, esta tendencia se intensificará.

Respecto a la situación de orden público, la industria ha mostrado su preocupación ante los bloqueos y restricciones en las vías nacionales. 

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Estos bloqueos afectan no solo a las comunidades, sino también a la industria del petróleo, gas y energía, impactando servicios esenciales y empresas locales que apoyan a la industria de hidrocarburos.

El Informe de Taladros de Campetrol indica que la inversión extranjera directa en el sector petrolero creció un 5,4% en el segundo trimestre de 2023 comparado con 2022. No obstante, esta inversión se ha enfocado principalmente en el cumplimiento de obligaciones tributarias incrementadas por la reforma de 2022.

Las recientes medidas fiscales de la Reforma Tributaria han afectado la competitividad de Colombia en la industria petrolera. Ahora, países como Argentina, Guyana, Perú y Brasil presentan mayores oportunidades de inversión en hidrocarburos para 2023. Con esta situación, Colombia necesita establecer diálogos que impulsen un sector que representa una fuente significativa de ingresos para el país.

Ante este escenario, la exploración y producción se vuelven esenciales. Se necesita incrementar actividades que garanticen la seguridad energética y compensen el consumo anual de barriles en el país, incentivando la exploración y brindando las condiciones propicias para el desarrollo del sector.

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